Plato de selenita con flores Yin Yang

Plato de Selenita con Flores Yin Yang: El Equilibrio de la Luz y la Oscuridad

Propiedades Esotéricas de la Selenita:

• Purificación y Paz: La selenita limpia las energías negativas y promueve la claridad mental y espiritual.
• Elevación Espiritual: Facilita la conexión con guías espirituales y abre los canales de energía divina.
• Cargador Energético: Ideal para recargar cristales y amuletos con su vibración pura y luminosa.

Simbolismo de las Flores Yin Yang:

• Flor Negra: Representa el misterio, la introspección y la energía protectora de la oscuridad. Invita a aceptar los ciclos naturales de transformación y a abrazar el cambio.
• Flor Blanca: Simboliza la pureza, la luz y la renovación. Es un emblema de claridad y energía divina.
• Juntas: En un diseño estilo Yin Yang, estas flores personifican el equilibrio perfecto entre opuestos, recordándonos la interconexión de todas las cosas y la armonía del universo.

Leyendas y Tradiciones:

• Dualidad y Unión: El Yin Yang, símbolo de equilibrio universal, representa cómo las fuerzas opuestas se complementan y dan sentido al ciclo de la vida.
• Selenita como Puente de Luz: Antiguamente se creía que la selenita actuaba como un portal entre la tierra y los planos superiores, armonizando energías duales.
• Flores como Emblemas Espirituales: En diversas culturas, las flores negras y blancas representan la aceptación de lo desconocido y la celebración de la luz, creando un equilibrio necesario para el crecimiento personal.

Usos Espirituales y Decorativos:

• Plataforma de Equilibrio: Usa este plato para cargar tus cristales y objetos rituales, equilibrando sus energías con el simbolismo de las flores.
• Meditación de Dualidad: Un excelente complemento para prácticas meditativas enfocadas en la aceptación de la luz y la sombra dentro de ti.
• Decoración Mística: Añade un toque de sofisticación y magia a tu espacio sagrado, recordando el poder del balance energético.

Este plato de selenita con diseño de flores Yin Yang no solo es una obra de arte natural, sino también un recordatorio constante de la armonía entre la luz y la oscuridad. Ideal para altares, rituales o como pieza decorativa que eleva cualquier entorno con su presencia simbólica y energética.